Blog de Ignacio Fernández

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viernes, 9 de marzo de 2012

Lo europeo


     Un tiempo hubo en que Europa era para los españoles algo así como un horizonte de libertad; más tarde, un contrapeso de justicia para una legislación nacional caduca o abusiva; finalmente, un itinerario de modernidad a través de sus directivas, sus fondos estructurales y sus instituciones. Todo eso es pasado. Hoy Europa, la “vieja Europa” en palabras del viejo George Bush hijo, es una geografía extraviada que sólo mantiene un carácter nuclear cierto respecto al mundo en su condición de eje permanente de la gran depresión. Nos lo había advertido el sociólogo Alain Touraine al afirmar que la causa general de la crisis, y no su consecuencia como algunos piensan, reside en la impotencia económica, política y cultural de la sociedad europea y sus organismos: “Europa se encuentra sin proyectos, sin capacidad de movilización y, sobre todo, incapaz de elaborar un nuevo modo de modernización opuesto al que dio forma a su poder, y que no puede reposar sino en la reconstrucción y la reunificación de sociedades polarizadas durante tanto tiempo”. Quizá se deba a que nunca como ahora coincidió al frente de los gobiernos europeos una colección de políticos tan mediocres o ensimismados, con tan escasa carga de liderazgo y menor aún de cooperación, con unos rostros tan grises. Y lo peor de todo, como se observa en los tratados de gobernanza, en las reformas constitucionales o en la pérdida de soberanía presupuestaria de los estados, es el “crecimiento negativo”, según expresión de los tecnócratas, de cuanto constituye nuestro tuétano democrático. Sin olvidar que, desde que en 2010 se inició la penitencia de la austeridad y del ajuste, las trabajadoras y trabajadores europeos somos más pobres, más desiguales y menos ciudadanos, y que nuestro modelo social –ése que un día quisimos exportar- no va a ser defendido en nuestro lugar ni por los países emergentes, ni por los tigres asiáticos ni por el eterno amigo americano.

Publicado en La Crónica de León, 9 marzo 2012

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