Blog de Ignacio Fernández

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domingo, 2 de septiembre de 2018

Septiembre

     A diferencia de lo que el cancionero ofrece en pleno verano, que, según los entendidos, suele ser un producto corto, bailable y emocional, septiembre arroja melancolía sobre el calendario, lo cual, en materia cantable, nos proporciona sin duda mayor categoría. En esos pentagramas se encuentran, por ejemplo, canciones de Ute Lemper, Marianne Faithfull, Neil Diamond, de los vivarachos Earth, Wind and Fire o de los muy indígenas Manolo Tena y Los Enemigos. Un repertorio elocuente para saber de qué va el mes. Arrastramos el verano, sí, pero se anuncia una nueva estación.

     Sabido es que los cánones del calendario no son iguales para todos. Por tal motivo, hay quien habla de año natural, hidrológico, judicial… y así sucesivamente según sea la razón de ser de su regla temporal. Pero, quien más quien menos, casi todos hemos medido alguna vez el paso del tiempo de acuerdo con el compás escolar y, dependiendo de nuestra mayor o menor permanencia en las aulas, nuestros ritmos vitales no son otros para siempre que los del año académico. De ahí que este mes de septiembre tenga mucho de momento inaugural y así sea sentido por una inmensa mayoría de individuos. Así que, a pesar de las incertidumbres que todo principio produce, lo cierto es que deberíamos celebrar el mes con mayor entusiasmo del que en verdad se observa en el entorno. Y sobre ello se canta.

     De un lado, reinan los recuerdos, que tienden a ser agentes de la pasividad, cuando no del nihilismo si sólo nos plantamos en ellos. De otro, vencen las luces que se acortan y con ellas, el tiempo que nos dedicamos. Desde luego, no es recomendable caer en esas trampas de ídolos derrotados por los elementos. Antiguamente, esos trances, como tantos otros, se superaban a pelo. Hoy, en cambio, todo son consejos para sobreponerse al vértigo, guías de autoayuda y terapias antidepresión: septiembre convertido en mercancía del Doctor Frankenstein, como escribiría Luis Artigue, en una de esas novelas suyas que se digieren mejor en verano.

Publicado en La Nueva Crónica, 2 septiembre 2018

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